Cada 12 de julio se conmemora en México el Día del Abogado, una fecha que no solo celebra una profesión, sino que pone de relieve la función esencial que desempeñan las y los abogados en la vida pública, en la construcción del Estado de Derecho y en la defensa de los derechos fundamentales.
La figura del abogado sigue siendo clave en una democracia funcional: representa a los ciudadanos ante el poder, da voz a los sectores más vulnerables y garantiza que la legalidad se mantenga como eje rector del sistema institucional.
Con motivo de esta conmemoración, diversas figuras del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) expresaron públicamente su reconocimiento a quienes ejercen el derecho de manera ética, comprometida y socialmente responsable.
El senador José Ramón Gómez Leal, conocido como “JR”, compartió en sus redes sociales un mensaje en el que subrayó la importancia del derecho como herramienta de justicia, orden y democracia:
“Hoy reconocemos la labor de quienes hacen del derecho una herramienta de justicia, orden y democracia. ¡Felicidades abogadas y abogados!”, publicó.
A esta expresión de reconocimiento se sumaron otras voces relevantes del movimiento.
El senador Gerardo Fernández Noroña, presidente de la Mesa Directiva del Senado, ha promovido reformas enfocadas en fortalecer la defensoría pública, particularmente para que los sectores más desprotegidos tengan acceso real a la justicia. Su postura ha sido clara al señalar que la figura del abogado es indispensable para equilibrar las asimetrías sociales.
Andrea Chávez, también senadora de Morena, ha sostenido que un sistema judicial moderno debe contar con juristas comprometidos con la defensa de los derechos humanos. Desde su curul, ha impulsado la transformación del Poder Judicial y ha defendido la participación de los abogados con perspectiva social y de género en la impartición de justicia.
Sergio Gutiérrez Luna, diputado federal con formación jurídica, ha insistido en la necesidad de fortalecer la ética profesional dentro del gremio, recordando que el derecho debe servir para cerrar brechas de desigualdad y no para reproducir privilegios.
Ricardo Monreal, coordinador parlamentario de Morena en el Senado, ha defendido históricamente la autonomía del Poder Judicial y la dignificación del trabajo jurídico. Como abogado de formación, ha abogado por una justicia imparcial, cercana a la ciudadanía y alejada de intereses facciosos.
Delia Enríquez Arriaga, activista legal e impulsora de redes de defensoría, ha destacado el papel de las abogadas comunitarias que trabajan desde lo local para proteger a mujeres víctimas de violencia, así como en la defensa de los derechos colectivos.

Una mención especial merece el trabajo de la senadora Citlalli Hernández, titular de la Secretaría de Mujeres de Morena, quien ha encabezado esfuerzos de acompañamiento jurídico a mujeres en situación de violencia a través del colectivo “Abogadas de las Mujeres”. Desde esa trinchera, Hernández ha reconocido el papel de estas profesionales del derecho en la defensa de causas justas, nobles y necesarias para alcanzar una sociedad más equitativa.
“Gracias a estas abogadas comprometidas, muchas causas nobles y justas han encontrado respaldo legal y sensibilidad humana”, ha expresado.
El mensaje común de todos estos actores es claro: sin abogados no hay justicia real, no hay defensa efectiva de los derechos ni se puede sostener un régimen democrático.
Más allá de los litigios, el derecho sigue siendo una herramienta poderosa de transformación social. La labor de las y los abogados no solo debe celebrarse, sino respaldarse con condiciones adecuadas para su ejercicio libre, ético y profesional.
El reconocimiento expresado por figuras de Morena en este Día del Abogado confirma que el respeto por esta labor no es solo protocolario, sino parte de una visión de país donde el derecho sea vehículo de justicia, equidad y paz social.
